Habitualmente
se crean durante tres días en las plazas lo que llamamos "Hora Feliz", un espacio exclusivo para los niños. Los
maestros en forma didáctica transmiten enseñanzas de vida basadas en valores
cristianos, se juega, canta, salta, grita junto a payasos y maestros, se comparte
una rica merienda, se entregan unos obsequios y el último día se realiza una
obra de teatro especial para niños.